La vida





Hay que tener presente que el Creador (Hijo eterno) da la vida al Hijo evolutivo y este Hijo evolutivo, es quien da la vida en los mundos destinados para su evolución y desarrollo. Esta formación de estado de vida es la que conocemos en nuestro mundo.

De nuestro mundo conocemos  los siguientes estados de vida: el mineral, el vegetal, el animal y el humano.

El estado mineral y vegetal pertenece al sistema planetario propiamente dicho y su evolución es diferente a los otros dos estados. Su evolución se tiene en cuenta para complementar a los otros. Podemos decir que pertenecen a la Creación que el Creador (Hijo Eterno) hizo cuando realizó la creación del sistema planetario, igualmente de la misma esencia que el Hijo evolutivo. Pero dista mucho de las creaciones o manifestaciones del Hijo evolutivo.

En el estado animal y humano están las manifestaciones de ese Hijo evolutivo.

En nuestro mundo tenemos que diferenciar entre las manifestaciones del Hijo evolutivo y su puesta en escena en este mundo. La puesta en escena en los mundos los cuales le corresponde para evolucionar, se tiene que entender que su ejecución es de forma totalmente natural y ajena al propio Hijo evolutivo. Pero sus manifestaciones son totalmente sus creaciones. Diremos que el estado animal y humano es la forma natural de vida del Hijo evolutivo en el mundo, pero las manifestaciones de estos dos estados de vida son las creaciones del Hijo evolutivo.

Dicho de otra forma, el Creador del Hijo evolutivo, hizo la Creación la cual conocemos de la misma esencia, ya que de otra forma un Ser no puede coexistir dentro de un sistema planetario que no lleve su propia esencia. Aquí tenemos el entendimiento que el Sol es el dador de vida para el ser humano, sin él no podríamos vivir. Por eso hay que tener en cuenta que los seres humanos llevamos la misma esencia energética que el propio Sol.

El estado mineral y vegetal son dos estados que coexisten en perfecta armonía, dada su naturaleza de creación y están dedicados a mantener los complementos necesarios, como la alimentación, para la subsistencia del animal y del ser humano.

La evolución del mineral y del vegetal está íntimamente ligada a la evolución planetaria, eso implica que sus cambios de estado evolutivo coincidirán con los cambios que efectúe el sistema planetario.

Distinto es ya la existencia de los estados animal y humana, sus cambios evolutivos van relacionados primeramente con el tiempo relativo de estancia en el mundo y seguidamente con los cambios del sistema planetario.

La evolución del animal va ligada con su especie y de forma conjunta con ella, nunca por animales individualmente hablando. La evolución es de toda la especie.

La evolución humana posee la cualidad natural de poder evolucionar individualmente. Cada persona puede desarrollar su evolución por separado de las demás, pero al tiempo, también estará ligada planetariamente y bajo sus cambios.

Otro de los razonamientos principales sobre la evolución que hay que tener, es que no existe nada en el Cosmos que funcione en solitario, todo está ínter-relacionado.





En este apartado nos ajustaremos a describir el asunto que nos procede para mejor comodidad a la hora de seguir describiendo la vida en la Tierra, como planeta originario de nuestro Sistema.

Dado así, que recordamos anteriores temas ya descritos, como el estado mineral y el vegetal como primeros estados de vida conocidos en nuestro planeta. Mencionábamos que sus cambios evolutivos iban directamente ligados a los cambios sobre el sistema y no individualmente en solitario. Podemos tener claro ya, al repasar el comienzo de vida sobre nuestro planeta que la descripción evolutiva de estos dos estados, pertenecen totalmente al ecosistema y que sirven realmente para complementar única y exclusivamente a los estados animal y humana.  En otras palabras, sirven para la evolución del animal y del humano.

Puntualicemos sobre los cuatro estados de vida, simbólicamente hablando, como una escalera evolutiva, desde el primer peldaño al último. De esta forma describiremos por orden, el primer peldaño al mineral que forma la base planetaria, luego en el segundo peldaño al vegetal, la base alimenticia, en el tercer peldaño nos encontramos con el animal, como forma evolutiva conjunta, de especies de animales, y en la cuarta y último peldaño evolutivo, el humano, como forma evolutiva individual, recordando que siempre se va ligado al Sistema.

Pasemos a detallar sobre el animal que fue el subsiguiente estado de vida conocido sobre la Tierra, el cual ha sido y a permitido, de forma natural que la evolución al proseguir su curso, se sirviera de una especie del estado animal ( los monos ) para dar el nacimiento a la especie humana. Aquí tenemos otra explicación a lo de evolucionar conjuntamente toda la especie en el estado animal. Aunque en determinados periodos planetarios para la evolución de una especie, puede perfectamente la evolución marcar la extinción completa de algunas especies o como pasó anteriormente, con todas las especies que haya sobre el planeta,  si así es requerido para los cambios planetarios.

En estos momentos ya tenemos el nacimiento del humano sobre esta tierra, el cual a partir de entonces, de forma natural, va avanzando en su evolución hasta llegar en su mismo estado como humano, al nivel de inteligencia.

Para finalizar esta sección, quiero hacer mención como recordatorio que tanto el estado animal, como el estado humano, son parte del Ser del Hijo evolutivo.




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